Declaración de Machu Picchu de los líderes de APEC 2024

Nosotros, los líderes económicos de APEC, nos reunimos en Lima, Perú, el 16 de noviembre de 2024. Inspirados en el tema de APEC “Empoderar. Incluir. Crecer.”, seguimos trabajando para lograr la Visión 2040 de APEC Putrajaya para una comunidad de Asia-Pacífico abierta, dinámica, resiliente y pacífica para 2040, incluso mediante la implementación del Plan de Acción de Aotearoa, para la prosperidad de todos nuestros pueblos y las generaciones futuras. Nuestros esfuerzos este año, llevados a cabo en las ciudades peruanas de Lima, Arequipa, Urubamba, Trujillo y Pucallpa, apuntaron a garantizar que todos nuestros pueblos puedan disfrutar de los beneficios del crecimiento económico inclusivo, maximizando las oportunidades para todos, al tiempo que se abordan los desafíos económicos más urgentes.
Los cambios rápidos y sin precedentes en curso siguen moldeando mundo de hoy. Plantean un desafío para el ajuste de nuestras economías para aprovechar las nuevas oportunidades y minimizar los riesgos que plantean. En este sentido, tomamos nota de los significativos cambios que afectan áreas como el comercio y la inversión, el medio ambiente, incluido el cambio climático, la seguridad alimentaria y la seguridad energética. En este contexto, una eficaz cooperación multilateral resulta aún más importante.
Como principal foro de cooperación económica regional, así como incubadora moderna, innovadora y eficaz de ideas, la APEC ha realizado contribuciones tangibles y prácticas para abordar los desafíos que ha enfrentado nuestra región. Defender a la APEC como un foro dinámico y resiliente para el diálogo y la cooperación económica, basado en sus principios voluntarios, no vinculantes y de formulación de consensos, es de suma importancia para nuestras economías. Reafirmamos, por tanto, nuestro compromiso de garantizar que Asia y el Pacífico siga siendo la región más dinámica e interconectada del mundo.
Sobre la base de los progresos realizados, este año hemos alcanzado logros concretos para adelantar una agenda de crecimiento económico inclusivo y sostenible. En este contexto, acogemos con beneplácito las deliberaciones a nivel ministerial de las reuniones sectoriales de 2024 y las declaraciones de consenso correspondientes, incluidas las relativas a las mujeres y la economía, las mujeres y el comercio, el comercio, el turismo, la energía, la seguridad alimentaria, la salud, las pequeñas y medianas empresas, la minería, las finanzas y la reunión ministerial de la APEC. También acogemos con beneplácito los resultados ministeriales y de alto nivel consensuados, incluida la Guía de políticas de la APEC para desarrollar e implementar marcos de políticas de hidrógeno limpio y con bajas emisiones de carbono en la región de Asia y el Pacífico, los Principios de Trujillo para prevenir y reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos en la región de Asia y el Pacífico y la Iniciativa de Finanzas Sostenibles del Proceso de Ministros de Finanzas.
Reconocemos la importancia de crear un entorno de comercio e inversión libre, abierto, justo, no discriminatorio, transparente, inclusivo y predecible y seguiremos trabajando para lograrlo. Reafirmamos nuestro apoyo al sistema de comercio multilateral basado en normas, con la OMC como eje central, y seguimos comprometidos a trabajar en pos de la reforma necesaria de la OMC, a fin de mejorar todas sus funciones. Seguiremos trabajando de manera constructiva para lograr la plena aplicación de los resultados de la CM13 y recordamos nuestro compromiso asumido en la CM13 de acelerar las conversaciones con otros miembros de la OMC con miras a contar con un sistema de solución de diferencias plenamente funcional y accesible para todos los miembros para 2024. Reafirmamos nuestro apoyo a la pronta entrada en vigor del Acuerdo de la OMC sobre Subvenciones a la Pesca y el término de las negociaciones sobre nuevas disciplinas. Reconocemos el papel positivo de las negociaciones y los debates multilaterales y plurilaterales en la OMC, incluidas las iniciativas de declaraciones conjuntas.
Reafirmamos nuestro compromiso de avanzar en la tercera fase del Plan de acción del marco de conectividad de la cadena de suministro y para mejorar la conectividad de la cadena de suministro y así minimizar los efectos adversos de eventuales perturbaciones, reducir los costos, facilitar el comercio y la inversión con el objetivo de establecer cadenas de suministro seguras, resilientes, sostenibles e inclusivas, y alentar la creación de capacidades para apoyar estos esfuerzos. Aceleraremos la plena aplicación del Acuerdo sobre Facilitación del Comercio de la OMC y promoveremos la facilitación del comercio mediante el uso de la digitalización, la automatización y las normas internacionales cuando sea pertinente, al tiempo que fortalecemos la cooperación entre los organismos fronterizos a través de los mecanismos existentes. Nuestro objetivo es mejorar la transparencia, la eficiencia y la fiabilidad del comercio mejorando los sistemas de ventanilla única, digitalizando los procesos clave y promoviendo el comercio transfronterizo sin documentación en físico, incluso mediante el intercambio de información sobre diferentes sistemas de comercio sin documentación en físico, la autenticación electrónica y el reconocimiento de documentos electrónicos relacionados con el comercio, como el conocimiento de embarque electrónico y la factura electrónica.
Reiteramos y apoyamos nuestro compromiso de promover la integración económica en la región de Asia y el Pacífico impulsada por los mecanismos de mercado y en línea con la Visión Putrajaya 2040 de APEC y las acciones colectivas pertinentes de la APA. Para avanzar en esta labor, respaldamos la Declaración de Ichma para dar una nueva mirada a la agenda del Área de Libre Comercio de Asia y el Pacífico (FTAAP), a través de la cual reconocemos documentos anteriores y continuaremos fomentando un entorno regional de comercio e inversión que sea adaptable y responda a los desafíos globales emergentes y las necesidades cambiantes de nuestras economías.
Reconocemos la convocatoria del Foro de la Mujer y la Economía de APEC de 2024 (WEF, por sus siglas en inglés) y la primera Reunión Conjunta de Ministros Responsables de la Mujer y Ministros Responsables del Comercio. Acogemos con beneplácito estos esfuerzos para acelerar la plena implementación de la Hoja de Ruta de La Serena para la Mujer y el Crecimiento Inclusivo y para lograr la igualdad de género y promover el empoderamiento económico de las mujeres en la región de Asia y el Pacífico. Reconocemos la importancia de desarrollar e implementar políticas, estrategias y reformas estructurales que aborden la igualdad de género y las múltiples y desproporcionadas barreras que enfrentan las mujeres y niñas de orígenes diversos. Reconocemos la importante contribución de las mujeres a la hora de impulsar innovaciones y crecimiento en un amplio espectro de campos económicos, incluidos los campos STEM y las industrias creativas, así como el comercio y el emprendimiento. Tomamos nota de la importancia de la cooperación en materia de género y cambio climático. Exploraremos otras formas de alentar activamente el desarrollo de iniciativas y estrategias para prevenir y responder a la violencia de género y la discriminación contra todas las mujeres y niñas. Reconocemos la importancia de empoderar a quienes enfrentan barreras estructurales para alcanzar plenamente su potencial económico. También reconocemos las valiosas contribuciones al crecimiento económico inclusivo de los pueblos indígenas, según corresponda.
Reconocemos la importancia de las reformas estructurales para lograr un crecimiento sostenible e inclusivo. Reafirmamos nuestro compromiso con la Agenda Mejorada de la APEC para la Reforma Estructural (EAASR, por sus siglas en inglés) y acogemos con satisfacción el progreso para desarrollar la “Agenda Mejorada y Reforzada de la APEC para la Reforma Estructural” (SEAASR, por sus siglas en inglés) 2026-2030”. Para avanzar en la agenda de reforma económica de la APEC, esperamos con interés la 4ª Reunión Ministerial de Reforma Estructural, que se celebrará en la República de Corea en 2025.
Acogemos las iniciativas, debates, buenas prácticas y experiencias compartidas este año como parte de la prioridad “Innovación y digitalización para promover la transición a la economía formal y global”, reconociendo que aumentar la participación de los actores económicos informales en las economías formales y globales puede mejorar las perspectivas de crecimiento económico inclusivo y sostenible de nuestras economías. También reconocemos la importancia de integrar a todos los actores económicos relevantes en la economía formal y permitir su participación en los mercados regionales y globales. En este sentido, respaldamos la Hoja de Ruta de Lima para Promover la Transición a las Economías Formales y Globales (2025-2040) y esperamos que continue su implementación a partir de 2025.
Reconocemos que la transformación digital y la innovación pueden ser motores clave del crecimiento económico y contribuir positivamente a la inclusión, ya que fomentan la reducción de las brechas digitales, incluida la brecha digital de género, permitiendo que las MIPYMES se vuelvan más competitivas, especializadas e innovadoras para apoyar su integración en las cadenas de valor globales, asegurando que todos los actores económicos tengan acceso a los beneficios económicos resultantes. Estamos comprometidos a promover la transformación digital en toda la región APEC, incluso mediante la implementación de la Hoja de Ruta de Internet y Economía Digital de APEC (AIDER), reconociendo su papel fundamental en la mejora de la conectividad digital. En consonancia con AIDER, cooperaremos para facilitar el flujo de datos, al tiempo que reconocemos la importancia de la privacidad y la protección de datos personales, y fortalecemos la confianza de los consumidores y las empresas en las transacciones digitales. Estamos comprometidos con apoyar un ecosistema digital propicio, abierto, justo, no discriminatorio, y más seguro e inclusivo. En este sentido, acogeremos con agrado las políticas que apoyen el desarrollo de la infraestructura, la alfabetización y las habilidades digitales, para que todos nuestros pueblos puedan participar plenamente en la economía digital y beneficiarse de ella. Reconocemos el potencial de la Inteligencia Artificial (IA) para impulsar la innovación, promover el crecimiento económico sostenible y transformar diversos aspectos de la vida diaria en nuestras economías. Esperamos continuar con iniciativas como el Mes Digital en 2023 y la Semana Digital en 2024 y reconocemos el valor de las contribuciones realizadas, incluidos los esfuerzos para reducir la brecha digital en la región de APEC. Sobre la base del trabajo realizado, nos comprometemos a proteger los derechos de propiedad intelectual a través de políticas y programas que promuevan la innovación y la creatividad. Reconocemos la importancia del desarrollo y la contribución de las tecnologías digitales para salvaguardar la salud de las personas y proteger a la región de las amenazas a la salud, y mejorar la resiliencia y la sostenibilidad de los sistemas de salud, avanzando así hacia la Cobertura Sanitaria Universal.
Nos comprometemos a impulsar la competitividad en el sector de servicios. Reconocemos la importancia del trabajo de APEC para facilitar el comercio de servicios relacionados con el medio ambiente y mejorar la cooperación en las cadenas de suministro ecológicas, apoyando la transición a economías más circulares. Una transición hacia modelos económicos más sostenibles fomentaría el crecimiento económico, la innovación y la competitividad en las economías de APEC. En este sentido, reafirmamos nuestro compromiso con los Objetivos de Bangkok sobre Economía Biocircular-Verde y con el avance hacia los objetivos de sostenibilidad de APEC en la región de Asia y el Pacífico. También reiteramos la importancia de integrar la inclusión y la sostenibilidad en las políticas comerciales y de inversión, como lo solicitaron los líderes el año pasado.
Acogemos con agrado los esfuerzos de las economías por promover la conectividad en la región de APEC. Seguimos comprometidos con la implementación del Plan de Conectividad de APEC (2015-2025) mediante el fortalecimiento de la conectividad física, institucional y entre personas, así como el aprovechamiento de la conectividad digital. Alentamos a las economías a intensificar los esfuerzos para promover la conectividad regional, subregional y de áreas remotas. También reafirmamos la importancia del desarrollo y la inversión en infraestructura de calidad. Alentamos a las economías a facilitar y promover el uso de una Tarjeta de Viaje de Negocios de APEC más inclusiva y damos la bienvenida a la adopción y aceptación por parte de las economías de la ABTC virtual.
Reafirmamos nuestro compromiso con la Hoja de Ruta de Seguridad Alimentaria de APEC hacia 2030, centrada en lograr la seguridad alimentaria en toda la región de Asia y el Pacífico mediante la promoción de sistemas agroalimentarios abiertos, justos, transparentes, productivos, sostenibles, resilientes, innovadores e inclusivos. Reconocemos que no existe un enfoque único para la sostenibilidad agrícola. Reafirmamos la importancia de la productividad agrícola, el comercio internacional y la prevención y reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos para lograr la seguridad alimentaria, y aumentaremos nuestros esfuerzos para la seguridad alimentaria y la nutrición. Alentamos a las economías a que sigan garantizar apoyando los esfuerzos encaminados a garantizar la disponibilidad y el acceso a alimentos seguros, nutritivos y suficientes para todos, cumpliendo al mismo tiempo nuestros compromisos de abordar los desafíos ambientales, incluido el cambio climático, y de promover la conservación de la biodiversidad, así como el uso y la gestión sostenibles de los recursos naturales. Poniendo de relieve el papel de la pesca en la seguridad alimentaria mundial, reconocemos también la importancia de combatir la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR) y los desechos marinos.
Reconocemos la importancia de garantizar la seguridad energética, la resiliencia y el acceso a la energía para apoyar un crecimiento y un desarrollo económicos sostenibles. Reconocemos que se necesita realizar mayores esfuerzos para que las economías aceleren transiciones energéticas limpias, sostenibles, justas, asequibles e inclusivas por diversas vías, en consonancia con la neutralidad de carbono y las emisiones netas de gases de efecto invernadero a escala mundial a mediados de siglo o alrededor de esa fecha, teniendo en cuenta al mismo tiempo los últimos avances científicos y las diferentes circunstancias nacionales. Reiteramos nuestros esfuerzos por triplicar la capacidad en energía renovable a nivel mundial a través de los objetivos y políticas existentes, así como plantear deseos similares con respecto a otras tecnologías de emisiones cero y bajas, incluidas las tecnologías de reducción y eliminación en consonancia con las circunstancias nacionales para 2030. También esperamos que los Ministros de Energía trabajen en la definición de un nuevo objetivo aspiracional colectivo para el sector energético a fin de aumentar la proporción de electricidad generada por fuentes libres de carbono y neutrales en carbono, al tiempo que se promueve la eficiencia energética como elemento central.
Reconocemos la importancia de seguir integrando las acciones para enfrentar los profundos desafíos que plantean los impactos del cambio climático, las condiciones meteorológicas extremas y los desastres naturales, ya que esto es esencial para construir un futuro sostenible para la región de Asia y el Pacífico. Reconocemos la importancia de tomar en cuenta las tecnologías de transición energética y promover la financiación adecuada de los sectores económicos. En apoyo a los esfuerzos de nuestra región para lograrlo, recordamos nuestro compromiso de racionalizar y eliminar gradualmente los subsidios ineficientes a los combustibles fósiles que alientan el derroche en el consumo y reconocemos la importancia de suministrar servicios energéticos esenciales a quienes los necesitan.
Reconociendo el impacto perjudicial de la corrupción en el crecimiento económico y el desarrollo, nos comprometemos a prevenir y combatir la corrupción y a negar refugio seguro a los culpables de delitos de corrupción y a mantener sus activos ilícitos. Acogemos con satisfacción el trabajo de este año en este sentido.
Nuestros grupos de interés y comunidades empresariales aportan creatividad, dinamismo y energía y siguen siendo socios vitales en nuestra labor. Esperamos seguir fortaleciendo la participación de múltiples partes interesadas, incluso con ABAC y el Consejo de Cooperación Económica del Pacífico, así como a través de eventos como la Cumbre de Directores Ejecutivos de APEC y el Foro de Futuro Sostenible.
Esperamos con gran interés que la República de Corea (2025), la República Popular China (2026) y Vietnam (2027) sean anfitriones de la APEC y nos comprometemos a apoyar a estas economías en su labor vital para impulsar la APEC. También damos la bienvenida a Singapur como anfitrión de la APEC 2030. Extendemos nuestro agradecimiento a la población y a la ciudad de Lima, y al Perú, por su cálida hospitalidad.